Casa Guardiola |
Cuando Marina nos llamó apresurada 2 meses antes de la fecha
no nos lo creíamos, íbamos a organizar la primera boda en aquella casa tan majestuosa
que tantas veces habíamos visitado y que tanta magia esconde en sus patios,
galerías, la elegante Logia o sus comedores, la Casa Guardiola de Sevilla.
Rápidamente, me puse manos a la obra porque había que reorganizar
una boda en mes y medio. Gracias a la sencillez y a la complicidad que me une a
Marina pudimos poner en orden el menú que querían tanto Pepe como ella, diseñamos el aperitivo según la nueva carta y pusimos a su disposición todo
nuestro material de decoración, quedando sin duda un almuerzo muy sencillo y
especial a la vez. Manteles de hilo color piedra, silla chivari de madera
decapada y fresias con flor de cera, fueron los elegidos.
El día del 28 de Febrero amaneció como una mañana de esas de
marzo sevillano, una Primavera que asomaba tímidamente entre las nubes de
algodón y ese cielo azul que sólo en Sevilla tiene su paleta. Entre sones de
campanas, coches de caballos y gentío llegué hasta la suite donde Marina,
flanqueada por la Giralda, me esperaba para los últimos detalles antes del gran
momento. En su cabeza, una diadema de cardos borriqueros en oro a juego con el
ramo entre rosas de pitiminí…delicada y espinosa como es esta princesita.
El almuerzo llegó, y los invitados en larga cola hasta la
puerta Jerez también, saludando y besando a la novia como si no hubiera un
mañana, nunca he visto a una novia sonreír y reír tanto como Marina.
El aperitivo en las antiguas caballerizas de la Casa
Guardiola sirvió de escenario para un ir y venir de bandejas con la nueva carta
de Sayca Catering para bodas: vieiras gratinadas, salmorejo de albahaca, quesos nacionales,
copitas de foie y pera glaseada, mini tartar de atún rojo de almadraba o steak
tartar de ternera, para luego culminar con un almuerzo en el patio central de
la casa, con un cuchareo de aquí, de nuestra tierra, un Caldoso de Langostinos.
Después, pues lo normal en estos casos, Marina y Pepe abrieron
el baile con un pasodoble muy torero: Maestranza de Sevilla…y el ir y venir en
este caso ya no fueron las bandejas si no las copas de balón…
Equipo de Sayca Catering |